Crucero por el Nilo: los 5 destinos principales

Crociera sul Nilo

El crucero por el Nilo es un viaje por la historia milenaria de Egipto, enriquecido por la belleza natural que rodea al río. Ese río, el Nilo, que tanto ha contribuido al desarrollo de la cultura milenaria de Egipto…

Con 6852 km de longitud, el Nilo es uno de los ríos más largos y con mayor caudal de agua del mundo (se disputa el récord con el río Amazonas) atraviesa nada menos que ocho países: Burundi, Ruanda, Tanzania, Etiopía, Sudán del Sur y Egipto, donde termina su largo recorrido en el mar Mediterráneo, desembocando en un impresionante delta.

Gran parte de su curso es navegable, y el famoso Crucero por el Nilo es una atracción turística que atrae a millones de turistas a Egipto cada año. El crucero por el Nilo es un viaje únicouna experiencia que combina la majestuosidad del pasado imperial de los faraones con la magnificencia del paisaje norteafricano.

Averigüemos juntos cuál es el mejor momento para embarcarse en esta aventura y cinco paradas imprescindibles en el camino.

La mejor época: otoño y primavera

Navegar por el Nilo es una experiencia memorable en cualquier época del año, pero el mejor momento para disfrutar de esta aventura es durante otoño (septiembre-noviembre) y primavera (marzo-mayo) cuando las temperaturas son moderadas, los rayos del sol no son agobiantes, y la vegetación en flor de las orillas del río añade un toque de magia al paisaje

1: Salida de Asuán la Joya del Nilo

El punto de partida preferido para iniciar el crucero por el Nilo es la ciudad de Asuán, la más meridional del Nilo, llamada la Joya del Nilo. En Asuán será posible visitar la Gran Presa de Asuán, el Lago Nasser y el antiguo Templo de Philae, donde se creía que estaba enterrado el dios Osiris.

2 Abu Simbel – El Templo de los Colosos de Ramsés

Una parada que todo turista debe considerar es una visita a Abu Simbel, en el lago Nasser, una de las maravillas arquitectónicas de Egipto. Construido durante el reinado del Faraón Ramsés II en el siglo XIII a.C., el templo es conocido por sus imponentes colosos, las cuatro grandes estatuas del faraón Ramsés II. Los dos pares de colosos, de unos 20 metros de altura, representan al faraón en posición sentada, con expresión regia y actitud orgullosa. Estas gigantescas figuras están talladas directamente en la roca circundante y son visibles desde lejos, creando un espectáculo impresionante.

3 Kom Ombo – El Templo del Dios Halcón y del Dios Cocodrilo

El templo de Kom Ombo fue construido durante el periodo ptolemaico, es uno de los templos más singulares y fascinantes del Antiguo Egipto. Lo que hace que este templo sea tan extraordinario es su dedicación a dos deidades, Sobek el dios cocodrilo y Haroeris (manifestación solar del dios Horus) el dios halcón. Esta doble devoción es evidente en la arquitectura y la disposición del templo. Las habitaciones gemelas, una para cada una de las dos deidades, muestran una fascinante visión de la doble devoción de los antiguos egipcios. Aquí podrás admirar los detalles tallados en las piedras y sumergirte en la atmósfera sagrada de hace 5.000 años.

4 Edfu el Templo de Horus

El Templo de Horus en Edfu, construido durante el periodo ptolemaico, entre el 237 a.C. y el 57 a.C., es una de las joyas arqueológicas del Antiguo Egipto, un majestuoso monumento que atrae a visitantes de todo el mundo. Situado en la orilla occidental del Nilo, este extraordinario templo está dedicado al dios halcón Horus, deidad asociada a la protección y al cielo.

5 Luxor – La Ciudad de los Templos (costa oriental del Nilo)

Tu viaje podría terminar en la ciudad de Luxor en la orilla oriental del Nilo, verdadero símbolo del poder del antiguo imperio egipcio. Luxor es una parada imprescindible en el crucero por el Nilo, aquí podrás visitar dos de los templos más importantes de la cultura egipcia: el imponente Templo de Karnak, uno de los edificios más majestuosos del mundoy el de Luxor ambos dedicados al dios Amón Ra, el padre de todas las deidades del antiguo Egipto. Por último, no te pierdas el Valle de los Reyes, en la cercana Tebas, donde muchos faraones, entre ellos Tutankamón, fueron enterrados con riquezas inimaginables.

En conclusión, los cruceros por el Nilo suelen durar una semana, siendo la ruta clásica la que va de Asuán a Luxor, la misma que ilustra este artículo. Es un viaje apasionante, de gran valor cultural con el que sueña todo amante de la historia y el arte. Un viaje apto para todos, especialmente para las familias.